martes, 21 de abril de 2009

LA EDUCACIÓN, ¿QUÉ QUEREMOS?

*Michael Gámez Begazo
Presidente de la FEP
Estudiante de la UNSA


Prepararnos para los cambios que se avecinan es una tarea primordial para los estudiantes y el pueblo en general, más aun cuando este año será un año lleno de luchas sociales y de definiciones. Lamentablemente el sectarismo implementado por algunos personajes, que se creían, o acaso aún se creen, los únicos dueños de la verdad no permitió avanzar en un proyecto más grande que eleve a niveles superiores las justas aspiraciones de los estudiantes y del pueblo peruano.

Este no es más que un mal síntoma que nos toca extirpar en todo sentido del movimiento estudiantil, más aún cuando se avecinan vientos de cambio en nuestro país, entender que los gremios y sindicatos no son exclusividad nuestra sino son instrumentos del pueblo. Empecemos pues entonces a forjar organizaciones populares con arrastre de masas desde abajo y sobre todo con objetivos sinceros y leales a nuestros ideales.

Tenemos la gran oportunidad y la responsabilidad de transformar nuestro Perú en un país mejor, con verdadera justicia, con poder para el pueblo y sobre todo con igualdad para los mas necesitados, hablamos entonces de darle un nuevo curso al Perú y eso significa cambiar las reglas de juego, empezando por la constitución política, Bolivia y Ecuador son ejemplos que si se puede hacer esto.

Y a nosotros los estudiantes que nos toca, siempre hemos afirmado que no se puede transformar un país si es que primero no se le da educación a sus pobladores, esto hace necesario reestructurar todo el sistema educativo nacional desde los niveles mas básicos hasta la educación de nivel superior ya sea esta universitaria o no universitaria. Todo esto de la mano con el pueblo, no existe educación aislada de la población.

Pero tenemos primero que preguntarnos que tipo de educación queremos, he allí la diferencia, si queremos una educación pro imperialista, una educación al servicio de las clases opresoras, una educación exclusiva, elitizada, funcional al modelo económico neoliberal, o queremos una educación al servicio del pueblo, una educación que nos enseñe a querer lo nuestro, una educación nacionalista, patriótica, científica, entonces esto significa la democratización de la educación nacional.

Para lo cual la creación un gran frente en defensa de la Educación Pública se hace necesario hoy mas que nunca, donde estudiantes, profesores, padres de familia, trabajadores no docentes y el pueblo nos pongamos de acuerdo en un solo programa, que gire en torno a la defensa de la educación pública y gratuita.

Por último nos toca a nosotros eliminar todo síntoma de enfermedad representada en el sectarismo, el autoritarismo y la imposición que algunos iluminados pretenden hacer, todo con las masas nada sin ellas, solo así podremos servir al pueblo de todo corazón.