sábado, 9 de octubre de 2010


Reacción en Rusia y el mundo ente el nuevo Nóbel de la Paz


Palabras claves: Nobel, China, Comentarios, Rusia, Política

9.10.2010, 20:34


En Oslo, la decisión del Comité del Nóbel de otorgar el premio de la Paz 2010 al defensor chino de los DDHH, Liu Xiaobo desató de inmediato animados comentarios. El espectro de opiniones es amplio, desde los aplausos a los miembros del Comité del Nóbel que respaldaron a Liu Xiaobo, quien está purgando una pena de reclusión prolongada hasta la mas firme indignación y acusaciones de sacrilegio.

Ninguna postulación del Nóbel ha provocado tan animados debates como el Premio de la Paz. La personalidad de los laureados mismos no es siquiera lo principal. Las discusiones reflejan distintos criterios con respecto a como debe desarrollarse el mundo contemporáneo, y que es de suma actualidad en este momento.

Liu Xiaobo es uno de los autores de la denominada Carta del 2008. En ese documento difundido hace dos años, un grupo de intelectuales chinos exigió a las autoridades la aplicación de reformas políticas y el quiebre del sistema monopartidista. En diciembre de 2009, un tribunal chino condenó a Liu Xiaobo a once años de cárcel.

Sin embargo, las autoridades chinas no consideran en absoluto un héroe a Liu Xiaobo. El portavoz de la Cancillería de Chila manifestó que Liu Xiaobo había atropellado las leyes chinas y, por el fallo de un tribunal fue condenado a prisión. "Lo que hizo, contraviene los principios de un Premio Nóbel de la Paz", indicó el diplomático. En Pekín definieron la decisión del Comité del Nóbel "de sacrilegio con respecto al Premio Nóbel de la Paz". Este fallo "desprestigió" el Premio Nóbel de la Paz, declaró del director del Instituto de Problemas internacionales de China, Tsioi Sin.

Y por el contrario, la decisión del Comité del Nóbel es definida de perfectamente lógica por la mayoría de políticos y expertos occidentales. El presidente de la Comisión Europea, José Barroso declaró que la decisión del Nóbel constituye la expresión potente de apoyo a los que, en todo el mundo, a veces con gran sacrificio pugnan por la libertad y los DDHH". El Ministro de Exteriores de Francia, Bernard Kouchner, quien respaldó también la decisión tomada en Oslo, instó a las autoridades chinas a liberar a Li Xiaobo. En el gabinete de la canciller Ángela Merkel subrayaron que consideran Liu Xiaobo "un gran defensor de los DDHH en su país", y de ahí que confiamos en su mas pronta liberación. El Comisario de la ONU para los DDHH, Navanet Pillai, declaró que Liu Xiaobo es un notable combatiente por los DDHH. El presidente del Parlamento Eiropeo, Ezhi Buzek, instó a las autoridades chinas a liberar de manera inmediata a incondicional al laureado del Premio Nóbel de la Paz Liu Xiaobo.

Las exigencias de liberación del disidente fueron emitidas también por el presidente Barack Obama. Liu Xiaobo es una persona notable y valiente que propicia la defensa de los valores universales en el mundo, incluidos la defensa de la democracia, los DDHH y el Estado de derecho.

Los expertos rusos consultados por nuestra emisora consideran que la decisión del Comité del Nóbel tuvo una motivación política. Es verdad que las razones y las consecuencias de esta decisión son evaluadas de distinta manera.

-Pienso que esta es una medida recia del Comité del Nóbel con respecto a China, declaró el profesor del Instituto de Relaciones Internacionales de la Cancillería, Serguei Luzyain. Pienso que en esta decisión ejercieron influencia informar fundaciones y organizaciones norteamericanas que critican la violación de los DDHH en China y en el mundo. La adjudicación a Liu Xiaobo del Premio de la Paz es una medida política al cien por cien, dictada por cálculos de carácter antichino.

Una opinión distinta, expresada a nuestra emisora tiene Andrei Karneiev, subdirector del Instituto de países de Asia y de África, adjunto a la Universidad Lomonosov de Moscú.

-Hasta donde podemos juzgar, las ideas expuestas por Liu Xiaobo y sus colegas en la "Carta 2008" comparten en China un número mucho mayor que las personas que los que firmaron el documento, afirma Karneiev. Muchos chinos no están dispuestos a plantear públicamente tal postura, pero es evidente la necesidad misma de promover reformas políticas y la modernización del sistema político.

A juicio del experto, la elite gobernante de China no es en absoluto monolítica, sino la combinación de distintas ideas y opiniones de diversas agrupaciones. En enero, un grupo de veteranos del Partido Comunista chino, en una carta abierta enviada a Hu Zintao, pedía revisar el castigo impuesto sobre Liu Xiaobo.

La gran interrogante es si la campaña en defensa de Liu Xiaobo, que adquirió carácter global, podría surtir el efecto contrario, es decir, llevar a frenar o al repliegue del proceso comenzado de reformas políticas prudentes y graduales.